(Chacarera)
Ser
un obrero del canto siempre fue mi derrotero
nunca
he pensado en los ritmos sino en la gente que quiero
la
que me brinda ternura cada día que amanezco.
Porque
son nuestras raíces las que precisan el riego
que
preserve la cultura que mantuvieran los viejos
pensando
en los sucesores que vendrían con el tiempo.
Sin
ser unos visionarios profetas de otro milenio
supieron
dejar cimientos para seguir construyendo
con
el hálito del grito y el misterio del silencio.
Estribillo
Tal
vez la vida me premie dándole luz al contexto
que
yo les dejo a los míos en mis anhelos y sueños
que
es preservar su cariño por que en el alma los llevo.
No
pienses en la cosecha si no comenzaste el huerto
la
tierra te lo da todo si tú le brindas esfuerzo
poniendo
sudor y ganas y gran parte de tu tiempo.
Pobre
del que considera que siempre la providencia
a la
corta o a la larga te ha de dar lo que tú sueñas
sin
aportarle a la vida ni un poquito de conciencia.
Yo
no sé si doy razones opinando a mi manera
queriendo verter ejemplos
si todavía me aconsejan
aquellos
que andando mucho se nutrieron de experiencia.
Estribillo final
Soy
un obrero del canto con más errores que aciertos
los
errores los corrijo los aciertos los festejos
y si
hoy yo canto una copla se la debo a mis ancestros.
Letra:
Anselmo de Mendoza
Música:
Javier Roa
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